Arma de doble filo
El caso del Morgan Plus 8 es un poco controvertido. Cuesta clasificarlo como uno de los peores, puesto que fue la razón de que los fabricantes sobrevivieran el mercado. Sin embargo, en Estados Unidos funcionaban a base de propano para aprobar las emisiones permitidas de la época. Esto significaba que el coche daba la sensación de ir mucho más lento de lo que realmente iba. Algo que puede llegar a ser muy peligroso para los conductores.
¿Qué fue de este coche?
El PT Cruiser perseguía la idea de traer de nuevo a la vida un diseño ya conocido de tiempos pasados, pero adaptado a los tiempos modernos. El problema fue que los fabricantes no dieron en el clavo en todo lo referente al rendimiento del Chrysler, dejando mucho que desear en la carretera. Por si fuera poco, la idea vintage no terminó de cuajar, pues muchos preferías vehículos de aspecto más moderno y deportivo.
¿Es un coche, es un avión?
Ni avión ni superman, este coche es un Davis D-2 Divan, que en 1947 llegó para dar un golpe de estilo en el mercado. Inspirado en lo que aquella época creyeran que el futuro traería al automovilismo, jamás llegó a ser comercializado. El encargado del proyecto no fue realista en sus estimaciones financieras y los inversores terminaron por perder el capital invertido. En consecuencia, el vehículo quedó en una simple idea que nunca fue llevada a la práctica.
¿Dónde comienza y dónde entra?
Lo más notable del Zundapp Janus fabricado en 1958, era que costaba darse cuenta qué parte era la delantera o la trasera. El diseño fuera de lo común no terminó por impactar a la audiencia, al menos no positivamente. Como consecuencia, fue un fracaso absoluto. Un detalle que a simple vista no se ve, es que este vehículo solo podía alcanzar la velocidad de 90 km/h. Algo limitado para tratarse de un automóvil.
Sentimientos encontrados
Es un caso difícil de catalogar, puesto que un sector importante del público adoraba este vehículo. Sin embargo, una famosa revista especializada dejó por el suelo su reputación al catalogar al Suzuki Samurai como “altamente peligroso”. Poco importó que más tarde se comprobara que las pruebas de seguridad habían sido alteradas. La reputación poco halagadora hizo su trabajo y dejó a los fabricantes fuera de los Estados Unidos en el año 2012.